GHG Protocol

La piedra angular de la medición de la huella de carbono

En el ámbito de la sostenibilidad y la lucha contra el cambio climático, la medición precisa de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) se ha vuelto fundamental. El Protocolo GHG, una herramienta de contabilidad de GEI ampliamente reconocida, proporciona el marco integral necesario para que las organizaciones midan y gestionen su impacto ambiental.

¿Qué es el Protocolo GHG?

El Protocolo de Gases de Efecto Invernadero (Protocolo GHG) es un estándar internacional desarrollado por el World Resources Institute (WRI) y el World Business Council for Sustainable Development (WBCSD). Proporciona un marco sólido y transparente para que las organizaciones calculen y reporten sus emisiones de GEI de manera creíble y consistente.

Historia y desarrollo del Protocolo GHG

El Protocolo GHG se publicó por primera vez en el año 2001 como respuesta a la creciente necesidad de un método estandarizado para la contabilidad de GEI. Desde entonces, ha sido objeto de revisiones y actualizaciones para reflejar la evolución de las mejores prácticas y los requisitos reglamentarios.

Alcance de las emisiones

El Protocolo GHG define tres alcances de emisiones, que permiten a las organizaciones comprender y contabilizar completamente su impacto:

Alcance 1: Emisiones directas

Las emisiones de Alcance 1 abarcan todas las emisiones directas de GEI procedentes de fuentes propias o controladas por la organización. Esto incluye emisiones de la quema de combustibles en instalaciones propias, vehículos de la empresa y procesos industriales.

Alcance 2: Emisiones indirectas por energía

Las emisiones de Alcance 2 representan las emisiones indirectas derivadas de la generación de electricidad, calor o vapor adquiridos y consumidos por la organización. Estas emisiones se generan fuera de las instalaciones de la organización, pero son consecuencia de su consumo energético.

Alcance 3: Otras emisiones indirectas

El Alcance 3 abarca todas las demás emisiones indirectas (no incluidas en el Alcance 2) que se producen en el ciclo de vida de los productos o servicios de una organización. Esto incluye emisiones asociadas con los viajes de negocios, el transporte de mercancías, el uso de productos vendidos y la gestión de residuos. El Alcance 3 suele ser el más complejo de medir debido a la naturaleza indirecta de las emisiones y a la participación de múltiples actores en la cadena de valor.

Beneficios de utilizar el Protocolo GHG

La adopción del Protocolo GHG ofrece numerosos beneficios a las organizaciones, entre ellos:

• Credibilidad y reconocimiento internacional: El uso de un estándar reconocido a nivel mundial como el Protocolo GHG aumenta la credibilidad de los inventarios de GEI de una organización y facilita la comparación con otras empresas.
• Toma de decisiones informada: Una medición precisa de las emisiones de GEI permite a las organizaciones identificar áreas de mejora y priorizar las iniciativas de reducción de emisiones más efectivas.
• Cumplimiento normativo: En muchos países y regiones, las empresas están obligadas a informar sobre sus emisiones de GEI. El Protocolo GHG proporciona el marco necesario para cumplir con estos requisitos.
• Acceso a mercados y financiación: Cada vez más, los inversores y los consumidores exigen transparencia en materia de sostenibilidad. Las empresas que miden y gestionan sus emisiones de GEI están mejor posicionadas para acceder a nuevos mercados y obtener financiación.

El Protocolo GHG en el contexto de la huella de carbono

La huella de carbono es una medida del impacto ambiental total de un producto, servicio o actividad, expresada en términos de emisiones de GEI. El Protocolo GHG proporciona la metodología para calcular la huella de carbono de una organización, abarcando las emisiones directas e indirectas.

Estándares y directrices complementarias

Además del Protocolo GHG, existen otros estándares y directrices relevantes para la medición de la huella de carbono, como:

• ISO 14064: Esta norma internacional proporciona requisitos y directrices para la cuantificación, el seguimiento, la presentación de informes y la validación o verificación de las emisiones y absorciones de GEI de una organización.
• PAS 2050: Esta especificación proporciona un método para evaluar el ciclo de vida de los productos y servicios, incluidas las emisiones de GEI.

El futuro del Protocolo GHG

El Protocolo GHG sigue evolucionando para abordar los nuevos desafíos y oportunidades en la medición y gestión de las emisiones de GEI. Se espera que las futuras actualizaciones del Protocolo se centren en áreas como la contabilidad de las emisiones del sector financiero, la integración de los objetivos climáticos basados en la ciencia y el desarrollo de directrices para la contabilidad de las emisiones de la cadena de suministro.

Conclusión

El Protocolo GHG es una herramienta esencial para que las organizaciones midan, gestionen y reduzcan su impacto ambiental. Al proporcionar un marco estandarizado y reconocido internacionalmente para la contabilidad de GEI, el Protocolo GHG permite a las empresas demostrar su compromiso con la sostenibilidad, cumplir con los requisitos reglamentarios y acceder a nuevas oportunidades de mercado.